Una de las maravillas de la cocina es poder compartirla. Está hecha de aromas, sabores y colores que estimulan los sentidos y nos acercan.
A menudo nos encontramos con amigos y compañeros para festejar, recordar o simplemente estar juntos y en esos momentos se hace presente la comida con su bagaje de sensaciones ideales para disfrutar en compañía.
Será por esa calidez que la cocina es el lugar más visitado de la casa y donde nos juntamos a compartir con aquellos que queremos.
Cuando imaginé Nomeolvides lo hice con la idea de disfrutar, divertirme y compartir el proyecto. Es por eso que se sumó una amiga que me dio la vida, ambas compartimos el jardín de nuestros hijos y desde ese entonces compartimos un sinfín de momentos.
Ahora me toca presentárselas: ella es Mandy, mamá de Pedro, Noah y Fermín. De origen inglés será quién - entre otras cosas - traerá la pastelería británica para el Five o´clock tea.
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